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En todas las tiendas físicas suele haber robos de vez en cuando. Lo que ocurre es que los robos no suelen darse en todos los tipos de tiendas, hay algunas que no tienen porque no interesan los productos o porque en realidad no es algo llamativo comparado con otra cosa. Pero, ¿y en una sex shop?

Si no tienes a nadie que pueda hablarte de los robos en sex shop ya te los decimos nosotros. Se dan, y lo cierto es que en una gran cantidad. Hay ocasiones en que puedes pillar in fraganti a la persona que está cometiendo el robo y frustrar sus planes pero otras veces se salen con la suya.

¿Qué se roba en una sex shop? Pues principalmente lo que se roba es lo que sea pequeño y que puedas ocultar fácilmente. Hablamos más de cremas, de balas vibradoras, de juguetes pequeños o barras de labios, etc. Son objetos que pueden pasar desapercibidos y no te das cuenta hasta que al final ya no está ese producto en la tienda.

También los vibradores suelen ser uno de los juguetes eróticos que se intenta robar en sex shop, aunque parezca que no, así como muñecos y productos más grandes incluso.

Los “ladrones” suelen esperar a que haya bastante gente en la tienda para cometer el robo o vigilan por si la dependienta está al teléfono o tiene que ocuparse de otras cosas para entrar y cometer el robo más fácilmente (ya que, si están despistadas, no pueden verlos si son rápidos y efectivos en su robo). El problema que tienes en una sex shop es que ésta no suele llenarse fácilmente; quizás más las que estén en los centros comerciales que suelen ser más habituales que se llenen de gente debido a que acabas entrando solo a mirar.

A la hora de prevenir los robos lo mejor son la utilización de cámaras de seguridad y de seguridad en la puerta para que, si se intenta sacar algo que no se debe, la máquina pite. Esto se suele colocar en las cajas porque no se pueden colocar en el juguete en sí (ya sabes que ha de estar impoluto, hablamos de algo íntimo), lo cual hace que no puedas estar segura el 100% de que va a avisarte del robo. Otra opción sería la de contratar algo más de personal para que esté pendiente de los clientes en todo momento sin llegar a agobiar (porque entonces conseguirás que éstos se vayan sin comprar nada).